Los lodos en las fosas, qué son y que hacer con ellos

En cualquier sistema de depuración de aguas residuales —ya sea una fosa depuradora biológica de oxidación total o una fosa filtro anaerobia— la formación de lodos es una consecuencia inevitable y fundamental del tratamiento. Gestionarlos correctamente no solo garantiza la eficacia del sistema, sino que también permite reducir impactos ambientales y aprovechar recursos valiosos. En este artículo, desde Edagua Solutions, te explicamos cómo se generan los lodos en distintos sistemas, qué se hace con ellos y qué factores debemos tener en cuenta.

¿Cómo se generan los lodos en una depuradora?

Los lodos se forman por la acumulación de materia orgánica y microorganismos que se desarrollan en los procesos de tratamiento. Dependiendo del tipo de instalación, los lodos pueden tener características y necesidades de gestión distintas:

1. Lodos en depuradoras de oxidación total (aeróbicos)

Este tipo de depuradoras utiliza un reactor biológico en el que se introduce aire de forma forzada para fomentar el crecimiento de bacterias aerobias. Estas bacterias consumen la materia orgánica del agua residual y generan biomasa activa, es decir, lodos biológicos aeróbicos.

• Estos lodos tienen un alto contenido en agua (hasta un 98%) y deben extraerse periódicamente para evitar su envejecimiento.
• Si no se eliminan, pueden generar problemas de decantación, malos olores o pérdida de rendimiento biológico.

2. Lodos en fosas filtro (anaeróbicos)

Las fosas filtro o reactores anaerobios funcionan sin oxígeno. Aquí, bacterias anaerobias degradan lentamente la materia orgánica, generando biogás y una menor cantidad de lodo, conocido como lodo digerido anaeróbico.

• Estos lodos tienen un ritmo de acumulación más lento, pero son más estables, aunque también más difíciles de deshidratar.

¿Qué se hace con los lodos?

Una vez extraídos, los lodos deben tratarse adecuadamente antes de su eliminación o reutilización. El proceso general incluye varias etapas:

1. Espesamiento: Concentrar los sólidos y reducir el volumen.
2. Estabilización:
   • En lodos aeróbicos: puede ser mediante aireación prolongada o compostaje.
   • En lodos anaeróbicos: ya vienen parcialmente estabilizados por el propio proceso.
3. Deshidratación: Con equipos como filtros banda o centrífugas.
4. Destino final:
   • Uso agrícola (si cumplen normativa).
   • Valorización energética mediante biogás (en el caso de lodos anaeróbicos).
   • Vertido controlado o gestión en planta autorizada.

Consideraciones clave para la gestión de lodos

• Frecuencia de extracción: Depende del dimensionamiento del sistema y del volumen de acumulación de la fosa, peros suele oscilar entre cada 1 o 2 años.
• Olores y patógenos: Una gestión deficiente puede provocar molestias en el entorno.
• Costes de transporte y tratamiento: Es importante optimizar el volumen y elegir el destino más eficiente.

Conclusión

Los lodos, tanto aeróbicos como anaeróbicos, no son simplemente un residuo: son una parte activa y necesaria del tratamiento de aguas residuales. En Edagua Solutions diseñamos, instalamos y mantenemos sistemas compactos y eficientes para pequeñas y medianas instalaciones, asegurando un equilibrio entre funcionalidad, mantenimiento y sostenibilidad. Si necesitas mejorar la gestión de lodos en tu sistema de oxidación total o fosa filtro, contacta con nosotros: te ayudamos a encontrar la solución más eficaz y segura.